Perder la Paciencia es una opción…

Lejos de lo que hemos escuchado en la idealización de la MATERNIDAD PERFECTA y dentro de la cuál me vi envuelta los primeros años, quiero hablarte de la PACIENCIA desde otro enfoque y al mismo tiempo darte mis herramientas para poder gestionarla en nuestra CRIANZA.

Muchas veces por no perder la paciencia, nos quedamos con nuestros sentimientos dentro, los reprimimos y NO RECONOCEMOS nuestras necesidades, lo cuál se traduce a un circulo del que no salimos hasta que tomamos CONCIENCIA y decidimos cambiar.

También puede pasar que justifiquemos la poca paciencia hacia el COMPORTAMIENTO de los niños, lo cuál si es un error, porque lo que en realidad nos muestra es una ALERTA de que es momento de parar y RECARGAR.

Llevar una CRIANZA CON PROPÓSITO más que necesitar que seamos pacientes, necesita que nos conozcamos y conectemos con nuestras EMOCIONES para crear un balance y es entonces donde por resultado obtenemos la paciencia.

Habrán personas que solemos ser más pacientes que otras si, pero en cualquiera de los casos, la paciencia hay que cultivarla y su principal ingrediente es el AMOR PROPIO, sin paciencia la CULPA se apodera de nosotros a grandes pasos y si nos quedamos allí podemos tomar 2 caminos: o ser muy permisivos o ser muy autoritarios, los dos extremos que no ayudan a construir un estilo de crianza positivo.

Así que lo que te quiero decir es que SI, es válido y NORMAL perder la paciencia, sin embargo en tus manos está que camino tomar y reconocer que te esta faltando, CONECTAR con tus emociones y recargarte.

Te dejo aquí 5 consejos para los momentos en que necesites recargar:

  1. Evalúa la situación, determina si estas dentro del control y si puedes hacer un cambio para no llegar a perder la paciencia completamente.

  2. Si pierdes la paciencia, tómalo como una alerta y busca opciones de como volver a llenar tu jarra.

  3. Ten una lista de opciones de actividades que te gustan hacer y establece momentos de la semana para hacerlos. No es necesario que sea diario, escucha tu cuerpo y conecta con tu interior cuando te pide recargar.

  4. Acepta la culpa pero no te quedes con ella, dale la vuelta y busca alternativas para salir de allí.

  5. No olvides que estamos modelando a los niños en todo momento, así que actúa como esperas que ellos lo hagan y en caso de tener una reacción pedir disculpas es siempre la mejor opción.

Espero que lo pongas en práctica y me compartas tus experiencias, si este artículo te gusto déjame un comentario.

Perder la paciencia es un opción, pero es tu

responsabilidad cultivarla!!!

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